El color de los tenis

Julito casi lloró, pero no puedo demostrarlo ahora mismo porque no tienen link. Fue el viernes en la mañana. Hoy se reveló por qué: hoy salió la SoHo especial de aniversario. Etc. Ahí salió el artículo en el que mi amiga Mónica Cabarcas (si necesita un elefante rosado ella le consigue el más bonito) más o menos demuestra que hay racismo en la zona Rosa, en la zona T y en la 93. Eso precisamente hizo que los ojos de mi querido calvo caucásico de voz sensual derramara lágrimas pues los lugares reseñados —y que quedaron como un culo— les hacían el feo a los especimenes nubios que acompañaban a la bella princesa guajira. ¿Cómo era posible que esos lugares —«tan queridos y cercanos a nosotros», dijo él— rechazaran a estas gentes buenas, que nada malo nos hacen? Por llevar tenis blancos, dicen en una de las tantas disculpas que quedan ahí en evidencia.

Dr. Barbarie y yo comentábamos que debería hacerse aún más extremo el experimento, al mejor estilo del fenecido Séptimo día. Una pareja —de blancos, claro— llega al bar y pregunta sencillamente «¿aquí dejan entrar negros?». A ver qué dicen. Auguramos que haya respuestas como «el pelao que diseñó el lugar nos dio una paleta de colores. Mírela. Antes de que alguien quiera entrar, mi compañero mira si el color de la gente si cuadra con esta escala cromática. Aquí tenemos un ambiente oscuro así que nos gusta que haya alto contraste entre la pintura de la pared y la gente, por eso no dejamos entrar negros. No se preocupe.» En otro lugar podrían usar la misma fórmula pero decir que, al contrario, la idea es que no haya contraste. Digo yo… si la vaina en realidad es por el color de los tenis. Mejor volver al Griffin.

12 Responses to “El color de los tenis”

  1. lucia Says:

    son peligrosos los argumentos de los dueños. leemos sin estremecernos que ellos “no discriminan por el color de la piel, sólo por la manera como están vestidos”. aaaaah, bueno! no se vale discriminar al negro, pero sí al pobre.

  2. Sangre Rebelde Says:

    Soy relativamente asiduo visitante de esos sitios y en serio me indignó leer ese artículo, en donde uno de los dueños decía: “los afronoséqué” y habla de “esa gente. Como me indigna, mi comentario será poco barroco y muy directo, no sin antes jurar que no volveré a los sitios de “la lista negra”:

    No joda, hay que tener conciencia social en este país. Primero, los putos matones de Open no dejaban columpiar a los niños pobres en el P de la 93, y ahora resulta que los hijueputas dueños de los bares creados por pelmazos (catalina aristizábal, el libretista gaitán o el no sé qué de Manolo Cardona) impiden la entrada a sus sitios de gente negra.
    “Que alguien no vaya al salto, no va a quebrar ese sitio”, no me importa, no lo hago como lucha, sino por respeto a mí mismo y a una raza a la que le han dado por el culo desde tiempos inmemoriales y no voy a mantener el status quo de estos indios peináos que no sé qué coños se creen, siendo ellos simplemente despreciables, representando la frivolidad que tiene hundido a este miserable país y la ignorancia de gentes que se gastan un montón de plata en donde estos bastardos; claro, pero los que van a estos sitios son los mismos que a la vez se emputan cuando un niño les pide monedas o les averguenza saludar a un celador.
    Y que en mi oficina no vuelvan a cuadrar almuercitos pa esos sitios, porque me resisto a ir y que el festejado o cumpleañero los cumpla muy felices, pero que se lo celebren en un lugar no tan premoderno.
    Si acá hubiera cultura, la gente iría a los tertuliaderos con historia (saint moritz, don benito, el viejo almacén) y no a estos museos de la superficialidad. SI nos emborracháramos en El Automático (donde se reunían los poetas de mediados de siglo y que es un sitio que todavía existe) y no en Danzatoria, la gente leería más y vería menos realities.

  3. Kunstmacher Says:

    Pues hay una cosa dentro de los argumentos de los dueños de los lugares, el “target”, ese es un argumento de negocio, de mercadeo, que es muy valido. Yo no quiero perder a mis clientes que vienen a pagar 500mil pesos por una botella de güisqui por no discriminar a los jovencitos que quieren emborracharse con aguardiente. Es muy sencillo!
    Ahora el problema es si llega el grupo de empresarios negros vestidos con Armani y zapatos de Salvatore Ferragamo (y no son gringos) y no los dejan entrar, el asunto si es discriminacion racial.
    Discriminar por los zapatos en general podria considerarse un filtro. Asi como en Dunkin Donuts no dejan entrar a un indigente. Un poco exagerado pero no es del todo una maldad negarle la entrada a alguien por ese motivo. De nuevo la discriminacion viene cuando a alguna persona negra no la dejan entrar asi tenga, de nuevo, zapatos de Salvatore Ferragamo, esta vez, Casual Collection.
    Imponer codigos de vestir es solo una manera de mantener gente de gustos similares en el mismo sitio, de nuevo el “target”, los bares son un negocio, no un sitio de diversion para todos. Si se imponene algunas pequeñas reglas, por tontas que estas sean, no le hacen daño a nadie. Si se tiene calridad sobre esto (un letrero que diga “teni blanco no entra”) pues la gente sabe a que atenerse desde el principio. Ni que fuera el unico lugar del mundo en el que discriminaroan por los zapatos.

  4. Anónimo Says:

    He ido pocas veces a esos sitios… trabajo en la zona en “la revista” y de verdad cuando uno sale de cierre los viernes a altas horas de la noche, es deprimiente ver los “New kids of the punk” y toda clase de especímenes clasistas mostrándose. Quisiera saber cuántos de esos “chinos” y “chinas” han estado en Paris, Tokyo, Milan, Bruselas?

  5. don tomate Says:

    es definitivo que existe racismo. un racismo que entre otras esta apoyado por revistas como soho. que lo denuncia y lo reproduce -no hay que ser explicitos para ser racistas-. sin embargo, vale la pena decir que el problema de la discriminación no está limitado al problema de raza (y la raza no solo tiene que ver con el color de piel).
    los argumentos de Kunstmacher son igual de poco amables a los de varios de los entevistados de los bares. aparentemente no está bien decir que uno es racista, pero es absolutamente entendible que las diferencias económicas son una forma válida de exclusión. la maldita palabra filtro, que tan bien fundamentada le parece a Kunstmacher, solo reproduce los aberrantes mecanismos de discriminación, otra vez, en lo que colabora tanto soho como por julito. si el problema es que esos son argumentos válidos en el mercadeo, es necesario tener una perspectuva crítica para entender que las formas de exclusión son irreducibles y una no puede estar por encima de la otra. la manera en que hemos convertido ese tipo de exclusiones en normales, la increible forma en que hemos naturalizado la discriminación, nos hace imposible a veces pensar precisamente en las múltiples facetas de la exclusión.
    si nos emborracharamos en una tina nos podriamos ahogar de paso en nuestro vomito, nadar en el y dejar de ver realities tambien.

  6. Kunstmacher Says:

    Pero es que es un negocio privado cuyo unico fin es dejarle dinero al dueño, no tiene porque no ser exlcusivo o excluyente, de hecho la exclusividad es parte del negocio, hacer sentir al yuppi exclusivo, hacerlo sentir que solo gente bien esta en ese lugar, es lo que realmente se esta vendiendo. Yo no estoy de ningun lado, casi nunca salgo, y cuando salgo prefiero ir a comer que de rumba y a la 93 solo voy por la torta de chocolate de Wok o a comerme una hamburguesa en el corral, casi siempre me la paso en tennis, y mas de una vez no me han dejado entrar cuando mis amigos mas rumberos han querido ir a algun lado. Pero la intencion es que uds. defensores de los pobres y de los discriminados, tiene que aceptar que asi se mueven el mundo, hay un sector del mercado de la diversion que se denomina exclusivo y vende su exclusividad, para mentenerla filtran. Puede Ud. muy bien irse de rumba por chapinero o al centro que la cosa es diferente. Pero igual creo que a un bar metal del centro no van a dejar entrar a un grupo de raperos, o si? Pero no es discriminacion eso porque no viene de los ricos del parque a los pobres del sur (?). Como muchas de las cosas que uds. dicen en la pagina de Miguel, creo son solo ganas de joder la vida. Pero siempre es mas divertido estar aca que haciendo fila en la 93 (o cualquier lugar del mundo) para entrar a algun sitio.

  7. don tomate Says:

    Kunstmacher:
    yo no estoy diciendo que usted haga o no lo haga. no me refiero a sus habitos, sino a algo que usted dijo que se me hiz parecido a lo que decían las personas entrevistadas de los bares. y entre eso siempre es bueno recordar que como dice lucia arriba, no se discrima por el color de la piel, sino porque se es pobre. eso no está bien. como tampoco lo estaría si en en un bar de metal se mete un rapero y lo sacan. y muchas otras cosas. ese no es el punto. la discriminación toma muchas formas, unas mas evidentes que otras, pero todas son. la dscriminación positiva, por ejemplo, tambien existe (el hecho que los afrodescendientes tengan una curul especial en el congreso por ser negros, para algunos grupos es racismo) y muchas otras cosas. lo que muestra la amiga del juglar es solo una forma en un espacio, y no problematiza las otras, porque son normales. para usted eso es normal, no para todo el mundo lo es, y por supuesto, no debería serlo.

  8. Juglar del Zipa Says:

    Don Tomate:

    Para mí el problema es grave, el de las exclusiones. Más o menos entiendo el punto de Kunstmacher, pero que el punto se sustente no significa que esté bien o que haya que estar de acuerdo. “El mundo es así”, pero también ha sido y puede ser de otra manera.

    SoHo no es una revista para denunciar, sabemos para qué es. La denuncia es una novedad introducida por Daniel Samper Ospina que quiere hacer de la gente bien gente de bien. Probablemente está lejos de cambiar el mundo. Pues mucho más lejos está de tener como objetivo “problematizar” o elaborar. Este ejercicio es lo que en periodismo se llama “mostrar, no decir”. Es un primer paso. Después veremos si sacan algún artículo de denuncia porque no dejan entrar al man de la cadena de oro, la narcotoyota y la mechipintada con tetas de caucho, etc.

  9. tiorojo, primer ministro de internet Says:

    Mi piel es color

    Pantone 7512
    o
    CMYK 0/46/100/33
    o
    HEX 996600
    o
    RGB 153/102/0

    clasifico?

  10. Juglar del Zipa Says:

    Tocaría hablar con el pelao que diseñó el sitio…

  11. petrit baquero Says:

    Eso es carreta. A René lo dejaron entrar a todos los sitios y ante la angustia de que se les iba a caer ese escándalo por figurar, les tocó buscar a un negro vestido escandalosamente, que evidentemente no lo dejaron entrar. Conclusión: en esos casos se vio clasismo, detestable también, pero no racismo.

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